Otra vez veo como pasan los segundos y me atormento.
Dentro de poco, será demasiado tarde.
Pero temo ser impulsiva. Prefiero no cometer errores.
Nadie me ha dicho que vaya a ser fácil. Pero tampoco me advirtieron de lo duro que es tomar decisiones importantes.
Aunque lo nieguen, sé que todo depende de pequeñas decisiones. De pequeños errores y pequeños aciertos.
Pero temo a las cosas que me perderé si elijo una u otra opción.
Porque al fin y al cabo... nosotros estamos hechos de pequeñas casualidades, de pequeñas decisiones que nos han conducido hacia donde ahora estamos.
¿A dónde me llevarán mis propias decisiones?
María.
2 comentarios:
Quizá la mejor opción sería no pensarlo tanto. Me explico,claro que hay que pensarlo,pero no des tantas vueltas a lo que te puedes perder. Déjate llevar un poco por tus impulsos,ahora que ya has sopesado todo y aún así no decides.
Fíate de ti misma!
Un beso ! ^^
Gracias Burbuja!
Tienes toda la razón! Aveces soy demasiado rebuscada!
BESOS!
Publicar un comentario