Siempre creí que la luna era del tamaño de una aceituna ¿sabes, mi amor? hasta que un día me dijeron que era casi tan grande como la Tierra. Pero me da igual lo que digan, yo cada noche tapo con mi dedo gordo la luna... y sigue pareciéndome igual de pequeña...
-¿Por qué me cuentas todo esto?- Dijo reprimiendo una sonrisa
-¡¡Porque casi todo es relativo!! Aunque tú estés a nosecuantos kilómetros y digas que estás muy lejos de mí.. sigue pareciéndome oír tu risa cada mañana de verano, sigo oliendo tu perfume en cada rincón de nuestra casa, sigo recordando cada beso después de cada discusión, sigo amándote cada día más. Porque sé que tienes miedo de perderme en esos nosecuantos kilómetros...
Pero cada noche tapo la luna con mi dedo, me burlo de la grandeza... porque lo único realmente grande en la vida es el amor, y sé que eso no es relativo. Mi amor no se puede comparar con una aceituna.
Así que cada noche que me eches de menos, piensa que a nosecuantos kilómetros estaré yo, contemplando la misma luna que tú. Y entonces lo comprenderás todo.
MARÍA S.
4 comentarios:
Simplemente tengo que decir que me encantó! ^^
Gracias! Muchísimos besooooos!! (K)
María.
Uau...sin palabras :|
Gracias burbuja! :)
besitos!
Publicar un comentario